¿Qué es el certificado de eficiencia energética?
Se trata de un documento oficial (CEE) que refleja el grado de eficiencia con el que un edificio, vivienda o local, consumen energía. Estos certificados se clasifican en una escala de letras que va de la “A”, para la mayor eficiencia, hasta la “G” para la menor.
El certificado de eficiencia energética ofrece información sobre las características energéticas de la vivienda, así como recomendaciones para mejorar su eficiencia.
La fachada, la altura de la vivienda, la orientación de las paredes, la superficie de las ventanas, la calefacción o el aire acondicionado son algunos de los aspectos determinantes.
Una buena calificación puede ayudar a aumentar el valor de la vivienda, al demostrar que sus gastos asociados a la energía pueden ser menores en comparación con viviendas menos eficientes.
El proceso para conseguir este certificado energético consta de varias fases, en las que intervienen técnicos expertos competentes en la materia, generalmente arquitectos o ingenieros. Por lo general, una agencia inmobiliaria especialista en la compra venta de inmuebles, puede ocuparse íntegramente de la gestión. De igual modo, podrá gestionar su correspondiente renovación, cada 5 o 10 años, en función del grado de eficiencia energética que posea la vivienda.
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¿Cuándo es obligatorio el certificado de eficiencia energética?
En España se siguen las directrices de la Unión Europea, siendo obligatorio contar con el certificado de eficiencia energética en las siguientes situaciones.
- Venta del inmueble. El vendedor debe presentar el CEE en vigor en el momento de la transacción. La etiqueta energética debe aparecer en cualquier publicidad destinada a vender o alquilar el inmueble.
- Alquiler de inmueble. El propietario debe proporcionar una copia del CEE al inquilino antes de la firma del contrato.
- Edificio de nueva construcción. Deben contar con el CEE una vez finalizada la construcción.
- Edificios a reformar. En caso de que la reforma afecte al 25% o más o bien si la reforma implica la sustitución o instalación de sistemas que afecten a la eficiencia energética.
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¿Cómo conseguir el certificado de eficiencia energética?
Estos son los pasos a seguir para la obtención del certificado:
- Contratación de un técnico cualificado para realizar la certificación. Es esencial asegurarse de que posea la capacitación y autorización necesarias para llevar a cabo la tarea.
- Visita al inmueble. El técnico efectuará una visita al inmueble para recoger toda la información necesaria sobre las características constructivas, sistemas de climatización, agua o iluminación, entre otros.
- Análisis y cálculos. Con la información recopilada, el técnico competente hará los cálculos necesarios utilizando software específico para determinar la eficiencia energética de la vivienda.
- Elaboración del certificado. Se procederá a la elaboración del CEE, en el que se especificará la calificación energética del inmueble, desde una mayor eficiencia, calificada con la letra A, hasta la menor, con la letra G.
- Registro. Una vez obtenido el certificado, este deberá ser registrado en el organismo competente de la comunidad autónoma correspondiente y conseguiremos así la etiqueta de eficiencia energética.
- Pago de las tasas. En función de la comunidad autónoma, podría requerirse un pago de tasas asociadas al registro del certificado.
Así pues, si estás pensando en alquilar o vender tu propiedad, debes saber que es obligatorio contar con el certificado de eficiencia energética.
Una buena opción para gestionarlo, de manera sencilla y, sobre todo, rápida, es confiar en una agencia inmobiliaria. Experta en la materia, se encargará de valorar tu vivienda y tramitar los certificados necesarios para poder proceder a su venta.
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¿Desgrava el certificado de eficiencia energética?
El certificado de eficiencia energética es una herramienta que busca promover la sostenibilidad y la reducción del impacto ambiental de los edificios. En este sentido, desde el 2022, el gobierno premia las obras de mejora energética de la vivienda, con una repercusión positiva en la campaña de la Renta.
Podrá deducirse entre un 20% y un 60% por obras de mejora energética realizadas en la vivienda habitual.
Existen tres tipos de deducciones (no acumulativas)
- Deducción por obras para reducir la demanda de calefacción y refrigeración
- Deducción por obras de mejora en el consumo de energía primaria no renovable
- Deducción por obras de rehabilitación energética
En conclusión, podemos decir que sí: apostar por la eficiencia energética en el hogar desgrava. Sin embargo, requiere de mucha organización en la preparación de la documentación y el cumplimiento de plazos para llegar a conseguirlo. Una vez más, confiar en la experiencia de una agencia inmobiliaria experta en el sector, puede facilitarnos mucho las cosas en este sentido.
